Previo a su zarpada de Ushuaia para cumplir con la tercera etapa de la Campaña Antártica de Verano 2018/2019, el rompehielos ARA “Almirante Irizar” fue escenario de la ceremonia por los 40 años de la creación de la Segunda Escuadrilla Aeronaval de Helicópteros (EAH2).
La misma fue presidida por el Comandante Conjunto Antártico, General de División Justo Francisco Treviranus; acompañado por el Comandante del Componente Naval, Capitán de Navío Carlos María Allievi; el Comandante del Componente Terrestre, Coronel Adolfo Humaran; y el Comandante del buque, Capitán de Navío Maximiliano Mangiaterra.
También estuvieron presentes autoridades navales, del Ejército, dotación del rompehielos y dotación complementaria embarcada de la EAH2, al mando del Capitán de Fragata Diego Pedreira.
Para dar inicio a la ceremonia el Teniente de Navío Técnico Héctor Omar Ayuso pronunció una alocución en la cual realizó un recorrido histórico desde la creación de la Escuadrilla el 30 de marzo de 1979 hasta la fecha, resaltando las funciones de la misma.
“Los helicópteros de la Escuadrilla están diseñados para operaciones antisubmarinas; tareas de exploración; guiado y ataque; helitransporte de asalto; búsqueda y rescate; evacuación sanitaria; apoyo a la población civil en siniestros y emergencias; reabastecimientos logísticos de bases terrestres y unidades de la Flota de Mar”, expresó el Teniente Ayuso.
Además destacó la participación en el Conflicto del Atlántico Sur donde operaron desde el rompehielos ARA “Almirante Irizar” y el portaviones ARA “25 de Mayo”, siendo los primeros en tocar suelo malvinense y los últimos en dejarlo.
Un párrafo aparte se llevaron las operaciones que se realizan en los meses de verano, donde helicópteros Sea King son destacados al rompehielos para realizar las tareas de reaprovisionamiento de bases y recambio de personal, donde la meteorología es un condicionante.
Para concluir su discurso, el Teniente Ayuso remarcó: “Cada hombre que integró e integra esta unidad forma parte de la historia y el presente de la misma, la cual se encuentra nutrida por el esfuerzo, la vocación de servicio y la entrega de todos ellos. Valores que forjaron el conocido lema Seriedad y Humildad”.
Antes de dar por finalizada la ceremonia, el Capellán Pablo Caballero Karanik realizó una invocación religiosa.