Punta Indio – El martes pasado, en la Base Aeronaval Punta Indio (BAPI), se desarrolló la ceremonia en conmemoración por los 25 años de la creación de la Escuadrilla Aeronaval de Vigilancia Marítima (EA1V). La misma se realizó siguiendo las medidas de prevención que exige el contexto de pandemia y contó con la presencia de representantes de los destinos con asiento en la mencionada base. También estuvieron presentes algunos de sus ex comandantes, como el primero de ellos, el Capitán de Navío VGM (RS) Mario Cacault.
Durante el acto, el Comandante de la EA1V, Capitán de Corbeta Christian Leandro Genson, luego de agradecer la presencia de autoridades y del personal presente, destacó: “Dentro de un componente de centenaria existencia, formamos parte del último cuarto de siglo de su historia. Sin embargo, nuestro pasado se remite aún más allá en el tiempo y está vinculado con hechos significativos. Ejemplo de ello, constituyen los primeros vuelos fotográficos, de reconocimiento, patrullado y rescate. Estos hechos constituyen el legado de muchos hombres de la Aviación Naval, desde pioneros fundadores hasta veteranos de guerra. Hoy 25 años después de aquel primero de abril, nos congregamos para revalidar el compromiso de honrar a diario el lema de esta Escuadrilla: ‘EA1V – todo tiempo, todo lugar’”.
Para el evento, además, se diseñó un escudo alusivo que tiene como elemento principal a un ave cormorán, con cuyo nombre se identifica a las aeronaves que fueron modificadas con el proyecto homónimo. Con dicho escudo se realizó el ploteo de dos de sus aeronaves.
Por su parte, el Padre Alfredo Fermín López Morilla, Capellán de la BAPI, realizó una invocación religiosa en la cual recordó tener presente el símbolo del parche de la Escuadrilla: “El cormorán, ave fecunda cuyos nidos se asientan sobre la costa rocosa de nuestra Patagonia, para proteger y alimentar a su prole incursiona varios kilómetros sobre el mar, cazando zambulléndose en las gélidas aguas. Él nos inspira a reconocer la vocación a la que hemos sido llamados: defender y proteger a los hijos de estas tierras de los peligros de la frontera marítima”.
Escuadrilla Aeronaval de Vigilancia Marítima
La EA1V estuvo basada inicialmente en la Base Aeronaval Almirante Zar (Trelew). Sus aeronaves, Super King Air 200, fueron modificadas mediante el “Proyecto Cormorán” a los efectos de mejorar sus capacidades (sensores y autonomía) para los vuelos de control del tráfico marítimo y pesca ilegal en la Zona Económica Exclusiva.
Esta escuadrilla aeronaval se erigió como una amalgama de varios destinos aeronavales y principalmente como sucesora de la Escuadrilla Aeronaval de Reconocimiento (EA4R), condecorada por “operaciones de combate” por su actuación en la guerra de Malvinas.