Adiestramiento del Batallón de Artillería de Campaña Nº 1

Los primeros días del mes, en la Escuela de Artillería del Ejército Argentino ubicada en Campo de Mayo (Buenos Aires), el Teniente de Corbeta Iván Agustín Trogu, del BIAC, participó del Curso Conjunto de Munición Merodeadora.  

Con la finalidad de certificar a oficiales y suboficiales de las diferentes Fuerzas en el empleo de este sistema de armas, en un entorno de guerra multidominio, el curso se llevó a cabo en dos etapas: una teórica en las instalaciones de la Escuela y otra práctica en un campo de instrucción de la localidad de Salinas del Bebedero, provincia de San Luis. 

Asimismo, el Teniente de Navío Luciano Nicolás Díaz, Jefe de la Batería Charlie del BIAC, participó del Curso Conjunto de Planeamiento y Coordinación de Apoyo de Fuego (C-16), dictado en la Agrupación de Artillería de Campaña 601, también ubicada en la ciudad de San Luis.  

Este curso tuvo como finalidad estandarizar en el ámbito conjunto, el planeamiento y coordinación de los apoyos de fuego para el empleo del instrumento militar, para que los cursantes afianzaran los conocimientos doctrinarios.  

Oficiales, suboficiales y cabos del BIAC, junto a personal del Regimiento de Artillería Nº 1 (RA1), el Grupo de Artillería Aerotransportado 4 (GAA4), el Grupo de Artillería de Montaña 8 (GAM 8), y personal y medios de la Escuela de Artillería, fueron evaluados con un ejercicio integrador de tiro real.  

También se efectuaron múltiples misiones de fuego con ejecución de tiro real mediante el empleo del sistema de armas CITER de 155 mm, y el lanzamiento de municiones merodeadoras, donde todos los integrantes del BIAC formaron parte de las dotaciones. 

Al finalizar las actividades, el Comandante del BIAC, Capitán de Fragata Ariel Pronzatto, expresó que la instrucción y adiestramiento conjunto en el empleo de los sistemas de armas de artillería en entornos multidominio -propios de los escenarios del siglo XXI–, “resultan de suma relevancia para la Armada Argentina, con el afán de alcanzar los estándares exigidos para un eficiente empleo del instrumento militar.”  

Las actividades conjuntas no solo contribuyeron a incrementan el nivel personal de la especialidad de artillería, sino también a estrechar los lazos de camaradería con el personal de las demás fuerzas, fomentando la acción militar conjunta.