Institucionales
Homenajearon al Contraalmirante Manuel José García- Mansilla
sábado, 4 de octubre de 2025
Con motivo de conmemorarse un nuevo aniversario de la creación de la Escuela Naval Militar, la Armada Argentina recordó a este destacado marino que cumplió funciones como director del establecimiento educativo naval.

El acto fue presidido por el Jefe del Estado Mayor General de la Armada, Almirante Carlos María Allievi. Estuvo acompañado por el Director General del Estado Mayor de la Armada, Vicealmirante Juan Carlos Coré; el Director General de Educación de la Armada, Vicealmirante Juan Carlos Romay y el Secretario General de la Armada, Contraalmirante Enrique Antonio Balbi; entre otras autoridades navales. Asimismo participó una comitiva de la Escuela Naval Militar y miembros de la familia García- Mansilla.

La ceremonia inició con la colocación de una palma de laureles al pie de una estatua que evoca al marino, junto a la bóveda que guarda los restos de su familia.
Luego de un minuto de silencio y rendición de honores, en representación del Cuerpo de Cadetes de la Escuela Naval Militar, el Brigadier Principal Cadete Francisco Crouset expresó unas palabras. Resaltó que el proyecto de la ESNM, fundada el 5 de octubre de 1872, conllevaría grandes desafíos: “Se requirieron de varias modificaciones pero sobre todo de grandes oficiales para hacer de la Escuela Naval Militar la institución castrense a la cual la República Argentina aspiraba. Y de estos grandes hombres es quizá el más decisivo el Contraalmirante Manuel José García- Mansilla”.

Puso de relieve que bajo su dirección, la ESNM se erigió como un instituto de formación de primer nivel: “Buscando de sus egresados un perfil profesional acorde a los elevados estándares de la oficialidad de la Armada Argentina”.
Señaló que, a lo largo de sus 30 años de servicio, este distinguido oficial trabajó con empeño total para hacer de la Armada Argentina uno de los grandes referentes de su época, “siendo quizá el mayor referente de los marinos de la generación del 80. Fue esta oficialidad la que marcó un cambio de paradigma, entendiendo el mar como factor de progreso y desarrollo”.
“Dejó un importante legado no solo por su ilustre pensamiento que hizo de él el gran transformador de la Armada Argentina, sino también una importante figura que contribuyó en variados ámbitos al progreso de la Nación”, puso de relieve en alusión a su legado tras su fallecimiento.

Legado
El Contraalmirante Manuel José García- Mansilla falleció hace 115 años, el 18 de agosto de 1910, siendo Director de la Escuela Naval Militar.
Nació en Buenos Aires el 17 de febrero de 1859; hijo de Eduarda Mansilla y del abogado y diplomático argentino Manuel Rafael García Aguirre, quien fue el encargado de concretar la compra de la escuadra de vapor y hierro de Sarmiento.
Completó sus estudios primarios y secundarios en Francia, donde la familia se había trasladado por las funciones de su padre. A los 15 años, estando en ese país, el 1º de enero de 1875 ingresó a la Escuela Naval, graduándose en abril de 1877 y alcanzando el segundo lugar de su promoción.

El 26 de diciembre de 1878, el Presidente de la República Francesa le confirió la Cruz de Caballero de la Legión de Honor, la más alta condecoración del país, por haber arriesgado su propia vida para salvar a un marino francés que había caído al mar durante la noche, mientras navegaban por el Canal de Suez a bordo de la fragata "La Victorieuse”.
El joven García-Mansilla había cumplido con la premisa que años después, siendo Director de la Escuela Naval, grabó a fuego en los futuros oficiales y que la Armada honra permanentemente: “Un hombre de mar nunca abandona a otro hombre de mar en peligro”.
En una carta le contó a su madre cada detalle de lo ocurrido, en la que también relataba que su viejo reloj se había arruinado por el agua salada. Esa historia del “reloj perdido” dio origen en 1946 al galardón que lleva el nombre de "Almirante Manuel José García-Mansilla" y que sus descendientes entregan al abanderado de la Escuela Naval Militar por su excelencia académica, su aptitud militar y sus valores éticos y morales.

Regresó al país en 1880 navegando en el Vapor Villarino, buque que cumplía con la misión de repatriar los restos mortales del General José de San Martín.
En 1900, fue nombrado Comandante Director de la Escuela Naval Militar, destino en el que ascendió al grado de Contraalmirante.
Desarrolló reformas sobre el plan de estudios y el reglamento orgánico, destacando la importancia del sentido profesional en la instrucción de los futuros oficiales. Durante su gestión se creó también el escudo de la ESNM y se instituyó el Día del Cadete.
1906 lo encontró nuevamente como Director de la Escuela Naval Militar, hasta la fecha de su fallecimiento, a los 51 años.

Desde 2010 la Biblioteca de la Escuela Naval lleva su nombre y 14 años después, el 1° de octubre de 2024, se impuso nombre al edificio del Comando de la Flota de Mar.
Cada año se homenajea su figura en coincidencia con las diferentes actividades que se realizan por el aniversario de creación del instituto de formación de los futuros oficiales de la Armada Argentina.